Sin lugar a dudas, la pandemia causada por el Covid-19 nos azotó y cambió rotundamente nuestras vidas. Desde el año pasado que hemos vivido la cuarentena en nuestros hogares y ha significado un cambio de hábito, sobre todo, en la limpieza de nuestro hogar o espacio laboral, de la importancia de usar mascarillas y lavarse frecuentemente las manos con jabón.

La sanitización y desinfección de superficies y ambientes tomó un rol importante en los espacios de uso común. Y es por eso por lo que queremos mostrarte las formas seguras de hacerlo. Pero antes, ¿qué diferencia hay entre sanitización y desinfección? La sanitización es la aplicación de productos desinfectantes sobre distintas superficies para disminuir la carga microbiana. Mientras que la desinfección, corresponde a la eliminación parcial de los microorganismos en objetos inanimados asegurando la eliminación de las formas vegetativas, pero no la eliminación de esporas bacterianas.

Tanto la sanitización y desinfección debe ser constante, utilizando productos idóneos con propiedades antisépticas (destruyen gérmenes que infectan un organismo vivo) y desinfectantes (agentes químicos usados en los procesos de desinfección de objetos, superficies y ambientes), ya que es posible que el virus permanezca en el medio ambiente por varias horas. Los mejores y más usados son: cloro, amonio cuaternario y alcohol.

Cloro

El cloro o hipoclorito de sodio es uno de los mejores desinfectantes para mantener fuera el Covid-19, muy recomendado para desinfectar superficies de permanente contacto directo como: manillas de puertas, paneles del ascensor, pasamanos, inodoro, llaves del agua, escritorios, mesones, que tienen un frecuente uso común.

El Minsal (Ministerio de Salud de Chile), recomienda que el uso del cloro debe ser de 20 cc o 4 cucharaditas por cada litro de agua, a una concentración del 5%. Para aquellas superficies que pueden ser dañadas por el cloro, se puede sustituir utilizando una concentración de alcohol etílico al 70%.

Amonio cuaternario

Después de la llegada del Covid-19 a nuestras vidas, el amonio cuaternario ha obtenido una creciente popularidad y uso, este poderoso limpiador y desinfectante cuenta con un amplio espectro para eliminar distintos microorganismos como virus (desnudos y envueltos tipo Coronavirus), clamidosporas, hongos, levaduras, bacterias, algas y esporas. También, posee un efecto residual, permaneciendo activo por más tiempo después de ser aplicado manteniendo sus propiedades. Existen diferentes generaciones de este producto, según el uso y disponibilidad, debido a que presenta un número ilimitado de combinaciones posibles.

Las últimas y nuevas versiones traen mejoras con mayor eficacia y menor toxicidad para la salud humana, son altamente biodegradables, presentando una alta efectividad sobre microorganismos que generan malos olores y enfermedades.

Al contrario de lo que se piensa, el amonio cuaternario es de uso profesional, su aplicación se realiza con equipos de protección personal, tomando las precauciones correspondientes. Puede ser aplicado en techos, pisos, paredes, baños, vehículos de transporte, lugares como restaurantes, gimnasios, veterinarias, cafeterías, colegios, hospitales, agroindustrias, etc. También existen alternativas diluidas en agua para el uso doméstico, como lo es el Dryquat, excelente alternativa para mantener a raya al Covid-19.

Alcohol

Llevarnos las manos a la boca, nariz u ojos (mucosas), sin darnos cuenta, y menos sin lavarnos las manos, es una vía de entrada segura para la transmisión de microorganismos. Si no disponemos de agua y jabón para lavarnos las manos, se puede utilizar como opción secundaria, los productos a base de alcohol, que contengan al menos un 60% de éste.

En relación a los productos con alcohol, podemos encontrar varios de ellos en el mercado y de distintas categorías, siempre y cuando cuenten con una autorización sanitaria. Es importante fijarnos en esto último al momento de adquirir un producto y cuál es su propósito, ya que podemos encontrar para uso farmacéutico y cosmetológico (para manos o cuerpo como soluciones tópicas y geles), médico (desinfección de material médico) o desinfectante.

Los productos que se encuentran en el mercado, que contengan como ingrediente el alcohol, puede ser: alcohol etílico (etanol), cuya concentración puede variar entre un 70 y un 96%, o bien, alcohol isopropílico que varía entre un 70 y 100%.

Para concluir, al momento de comprar cualquier producto destinado a la sanitización, debe ser obtenido en un establecimiento autorizado para la venta y evitar el mercado informal, ya que desconocemos su procedencia, resoluciones de salud, vencimiento, correcto envasado, ingredientes que lo componen y si cumplen con las cantidades aceptadas. Cuando un producto cumple con una autorización sanitaria, debe al menos decir su Registro ISP (Instituto de Salud Pública). Asimismo, se deben seguir las indicaciones del fabricante para su preparación y aplicación específica.

Para nuestro resguardo, es muy necesario hacer estas rutinas de limpieza, utilizando implementos de seguridad personal como guantes, mascarillas y delantales, para así comenzar a limpiar y desinfectar con estos productos sugeridos, usando rociadores, paños, mopas, trapeadores y equipo especializado. Es importante ventilar siempre los espacios al momento de sanitizar.

Descubre nuestros desinfectantes aquí.